Nos conocimos de la misma manera como nos conocemos quienes transitamos por cada uno de nuestros oficios; en la universidad o en los territorios de trabajo. Es así como empieza todo, luego
nace la empatía y los azares del destino que juegan un papel importante en nuestras vidas.
Con Hugo Gavilanes nos unió el mismo "campo de juego". También amigos en común y ese fanatismo por la música y la jarana con abrazos y celebraciones...sonreímos y
cantamos desafinados.
Hugo tenía dos marcadas cualidades que lo distinguían y las manejaba a la perfección. Nació con esa estrella.
En la pantalla y sus intervenciones imponía lo que pensaba era correcto, justo y necesario; cuando saltaba al suelo terrenal de quienes lo admiraban y respetaban, era el ser
humano que en el idioma urbano les dicen "pan de dios".
Era el prototipo del Supermán que conocemos desde niños. El héroe de la pantalla y el Clark Kent del mundo común. Su actitud para lo uno y la realidad para lo otro me evoca aquel encuentro
del boricua Ricky Martin con el argentino Sandro cuando este último le dijo: Nunca te compres lo que vendes".
Hugo Gavilanes sabía lo que representaba en la comunidad, la sociedad y los medios pero tenía medidos sus ángulos. Decía Chespirito: "Una cosa es una cosa y otra cosa es otra
cosa". Explosivo, arremetedor, valiente y frontal. Tejía sus redes de apoyo y respuestas con tan solo decir "lo quiero". Bonachón, alegre , espontáneo y jodedor cuando se vestía del Hugo
común...sin agregarle el Gavilanes.
Tenía aquella gran virtud para conectarse rápidamente con lo que se encontraba en su paso por la comunicación. Animador, presentador, reportero, redactor, locutor
y sobre todo: buen amigo y compañero de trabajo.
Vivimos experiencias maravillosas en la vida. Contarlas hoy ya no tienen sentido porque no es fácil describir momentos, circunstancias y hechos. La mejor manera de apreciar los
momentos de los amigos, es no olvidarlos.
Las fotos que acompaña este articulo son de febrero de 1986 . Hugo Gavilanes fue el conductor en la ceremonia de premios Entre Amigos . El escenario:
discoteca 300 Millones de las calles Cuenca y Chimborazo en Guayaquil. El lugar ya no existe.